JOSE MANUEL HORCAJO
Las emociones nos mueven y dan vida. Gracias a ellas nos sentimosvivos. Pero no siempre nos ayudan a acertar. Lo ha avisado el papaFrancisco: «Creer que somos buenos solo porque ôsentimos cosasö es untremendo engaño». Esto es el emotivismo. No basta con decir: «másrazón y menos sentimientos», como si estuviesen enfrentados. En elcorazón humano todo está unido. Sin pasión no tendríamos vida, sinafecto no haríamos nada. No hay que elegir entre razón y sentimientos. La solución no está en elegir una sola parte, sino en contemplar eltodo de la vida desde el corazón, desde el amor.