RENAU YUSTE, FERRAN
El autor es arquitecto, pero su verdadero oficio es el de sanador de viviendas que están enfermas: es domoterapeuta. Ciertamente, nuestros hogares pueden estar afectados por el telurismo (lo patógeno que proviene del subsuelo (aguas subterráneas, fallas...) y por el electromagnetismo (procedente de aparatos e instalaciones). Pero en las publicaciones existentes hasta la fecha nunca se ha explicado y clasificado debidamente el papel del espiritualismo a pesar de que los casos más graves y urgentes que figuran en el archivo del autor siempre han sido provocados por almas desencarnadas, memorias históricas o casos de magia negra. La vida es un hecho espiritual, una conexión que nos permite transmutar la realidad cuando es contraria a nuestro propósito de vida. Y es por eso que este libro propone y ejemplifica a través de 75 casos estudiados y una tabla de entidades que se publica por primera vez, estas aportaciones: Algunos fenómenos (materiales o inmateriales) nos afectan seriamente a través del ambiente enrarecido de nuestras casas o lugares de trabajo. Los fenómenos espirituales pueden y deben ser estudiados. En particular, la parasitación por entidades es muy poco conocida y generalmente mal interpretada. Todo fernómeno patógeno puede ser estudiado y sanado por vía espiritual. Lo cual no implica convertirse en un sectario o un milagrero. Los sistemas de análisis utilizados hasta la actualidad tienden más al miedo que al remedio. Este libro propone lo contrario. La luz, en su acepción espiritual, es el arma más fiable y segura para conseguir la neutralización de las distintas patogenias ambientales.