SIMÓN VICENTE
La compasión la asociamos a la pena, a la lástima. Esta visión de la compasión está muy extendida, pero es errónea. La compasión es lo que hay en los ojos de una madre que acuna a su bebé cuando tiene fiebre: se conmueve con su dolor pero sobre todo hace lo posible por sanarlo.
Este libro es una guía sencilla y práctica que te orientará en la ruta que se adentra en el corazón del mindfulness: la compasión.
La compasión y la autocompasión son habilidades que pueden ser entrenadas, fortalezas que nos permiten transformar para bien el sufrimiento emocional, que producen cambios cerebrales que contribuyen a mejorar las relaciones interpersonales, a aumentar nuestra sabiduría, nuestra salud y nuestra felicidad.